Chiringuito Azul

El amor de verdad dura siempre a pesar de todo lo bueno o malo que pase, así fue el de Lorena y Antonio.

Ellos se conocieron en Gandia, una noche que por casualidades de la vida llegó un amigo por equivocación donde estaba Lorena con su amiga, la amiga y un amigo los dejaron, a la semana siguiente volvieron a verse y allí fue cuando los dos supieron que había mucho amor entre ellos, pero la distancia no les dejaba avanzar lo que ellos querían.

Estuvieron cuatro meses juntos, el jugaba a fútbol y al lesionarse la rodilla dejaron de verse, todo esto ocurrió en Febrero.Tras pasar esto hablaban pero sin verse y finalmente el amor pudo con todo y con la distancia y en Febrero del año siguiente volvieron a verse, justo en Marzo Antonio le declaró su amor con una canción de fondo de flamenco ( Ojalá pudiera ir).

Me contó que tenían un chiringuito azul, 37 años ya y él le obligó a venir para que lo conociese, tras todas estos acontecimientos siguen día a día viviendo lo que le unió y nosotros fuimos afortunados de poder hacer su reportaje de fotos de la preboda y así de bonitas quedaron, justo en un lugar importante para ellos.

Un lugar mágico, donde luce el sol, donde los atardeceres son inolvidables, donde si tienes sed sirven el mejor trago para refrescarte, Antonio tenía claro que tenía que traerse a Lorena a este rincón y bonito de verano.

En apenas dos meses se darán el «Sí, quiero » de la boda.